martes, 28 de agosto de 2018

La izquierda y la inmigracion en occidecadente


EN mi modesta opinión, la izquierda actual simplemente ya no entiende el mundo en el que vive. Gobernada por élites que no han conocido las penurias ni por los libros de texto (nada que ver con Carrillo o Gutiérrez, por ejemplo) creen que su "lucha" por una serie de derechos estúpidos y completamente accesorios es la lucha justa y necesaria.

Y mientras, los obreros, que siempre han sido conservadores y de derechas (pan, trabajo y orden), ven que en su mismo segmento están entrando "a raudales" (da igual lo que digan las cifras, lo importante es la percepción) negros o moros jóvenes, que podrían trabajar en sus paises como los padres y abuelos de los europeos trabajaron reconstruyendo Europa tras dos guerras mundiales. 

Ayudas, ventajas, escuelas, comedores, atención, leyes.... no importa que no sean ni la mitad de lo que estos ciudadanos olvidados creen que son. Basta con un ejemplo, dos, tres... para que todo un barrio obrero crea a pies juntillas que los negros y los moros vienen a reventarles el pais que ellos creían que era suyo, o que al menos les tendría en cuenta.

Si juntas este desencanto, esa sensación de abandono, con hijos jóvenes sin empleo.... la mecha está prendida. Y vá a estallar en breve. Se avecinan tiempos sangrientos para los que más vale que nos vayamos preparando. Los gobiernos han perdido completamente el norte, feminizados y reblandecidos por varias décadas de abundancia y seguridad que, ahora, nadie sabe de donde ha venido y muchos creen que siempre ha estado ahí.

Pero la seguridad y la abundancia costaron millones de vidas y rios de sangre hace apenas unas décadas. Y pueden volver a costar lo mismo en una o dos generaciones. 

La izquierda, con sus mensajes ñoños e infantiles, ha abandonado al proleta, al lumpenproletariat que huele mal, que escupe, que perjuta en arameo. No son bonitos ni tienen glamour... por lo que ya ni siquiera son visibles. Ahora la izquierda, quien antes tenía la exclusiva de la lucha obrera, prefiere el tuit fácil, la photocall rosa, las armas de pasarela. No haber pasado hambre nunca es lo que tiene: que crees que todos son así.

Pero hay millones de españoles que las pasan putas para llegar a mediados de mes. Y da igual si tienen cultura, carreras o masters... Cuando compites por un puesto de trabajo poco especializado, porque son los que décadas de desgobiernos ineptos han permitido, cualquiera que esté en condiciones de competir es un peligro. Y los jóvenes y hambrientos moros y negros están en la misma pista de carrera que todos éstos.

¿Soluciones? Las hay, claro. Pero no son glamurosas ni políticamente correctas. Expulsiones, cierre de fronteras, corte de ayudas, prioridad a los nacionales y nacionalizados y mucha mano dura para impedir el más mínimo brote de violencia. 

Pero nadie está por la labor... así que más vale ir aprendiendo a manejar un arma. En no mucho tiempo, será realmente necesario, me temo

lunes, 13 de agosto de 2018

OCCIDECADENTE


nuestro mundo occidental , es un modo de vida excéntrico para los 7.500 millones de habitantes del planeta. Al fin y al cabo solo somos un experimento social como lo fue el comunismo soviético , a ver que pasa. 
Somos un ejemplo para el mundo de una distopía , y nos miran con asombro y perplejidad nuestra propia destrucción. 

Nuestra civilización promiscua, de desintegración de la familia , de parejas que copulan y luego se denuncian , se divorcian y se destrozan la vida mutuamente, de mascotas sustituyendo a los hijos, de vidas que giran únicamente en el ámbito laboral, sin redes de amigos que no redes sociales , sin amigos ni familiares, etc, etc ... indica a otros países como no hay que hacer. 

Somos un ejemplo para el mundo de la destrucción en lo social, como lo es Venezuela en lo económico.