sábado, 12 de junio de 2010

Raúl se cuela en el último entrenamiento de la Selección

Parecía que la polémica sobre la inclusión de Raúl en la Selección estaba zanjada pero según las últimas noticias no para éste. El pasado 9 de junio el delantero madridista estuvo entrenando más de cuarenta minutos en la Ciudad del Futbol de Las Rozas (Madrid)  con el resto de los componentes de la Selección española.
El bueno de Raúl pasa desapercibido durante el entrenamiento
El entrenamiento transcurría con normalidad, hasta que pequeños detalles se fueron acumulando. Según  comentó el responsable  de prensa: “Primero Villa se percató de que en uno de los rondos había otro jugador con su camiseta, con su mismo número y nombre. Después, llamó la atención del seleccionador nacional, Vicente del Bosque, que uno de los jugadores llevara un bigote de coña y gafas para hacer carrera continua”.
Aun así, el entrenamiento continuó y los jugadores se llegaron a familiarizar con un Raúl disfrazado. Sergio Ramos declaró:  ”El partidillo estaba siendo muy bueno. Groucho, que así le llamabamos, consiguió bastantes goles de rechace y nos ordenaba en el campo… en el fondo sabía que no era Groucho”.
Finalmente, Del Bosque llamó a la banda a Villa para darle instrucciones. Fue en ese momento  cuando el Míster se encontró cara a cara con los dos Villas: uno auténtico y otro con bigote y gafas de pasta redondas. Hubo un fuerte debate sobre cuál era el verdadero delantero de la Selección, hasta que convencieron al técnico de que era el que no tenía gafas.
Parece que el empeño de Raúl acabó ahí pero varias camaras de televisión grabaron al delantero madridista intentando suplantar al seleccionador con una careta de Superpotato dando ordenes desde la banda. Navas por un tiempo le hizo caso pero finalmente los compañeros le dijeron la verdad.
Lo último que se sabe es que los guardias de seguridad no dejaron pasar a Raúl al entrenamiento del día siguiente porque intentó entrar, esta vez, con una careta de Krusty el Payaso diciendo que era Del Bosque. Esta vez no pudo ser.


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