Ingredientes (para 3-4 personas)
- 5 jamoncitos de pollo- 1 cebolla grande- 2 dientes de ajo- 1 pastilla de caldo de pollo (o caldo de pollo)- 33 cl de cerveza (en este caso tostada)- 1 cucharada de pimentón- perejil picado- sal y pimienta
Preparación
Primer paso: en una olla grande, calentamos aceite, mientras salpimentamos los jamoncitos, y tras eso, los depositamos dentro y los freímos.
Aprovechamos este primer parón para picar la cebolla y el ajo, no os esmeréis mucho, ya veréis por qué. Cuando los jamoncitos estén bien dorados, los retiramos de la olla, y mantenemos el aceite, en el cual cocinamos ahora la cebolla y el ajo, hasta que la primera esté bien pochada. Después añadimos el pimentón (es de la Vera, lo prometo Rebeca), pero para ello apartamos la olla del fuego, y una vez hayamos mezclado bien, lo volvemos a poner al fuego.
Volvemos a echar el pollo en la olla y pasados dos minutos, añadimos el perejil picado, la pastilla de caldo y también la cerveza. Yo he optado por una cerveza tostada, porque quería un sabor menos suave, y me alegro mucho de haber optado por ella. Si queréis utilizar caldo sin más pero no en pastilla, debería ser como mucho un vaso de vino.
Mezclamos como bien podamos, y entonces cerramos la olla. Si podéis hacerlo con olla exprés como he hecho yo, pues con que lo pongáis a fuego medio-alto durante 10 minutos, lo tendréis listo, si no podéis o queréis, serán en cambio unos 40 minutos de olla a fuego medio. Tras esto, volvemos a retirar el pollo de la olla, y batimos el resto de ingredientes en la olla, para que nuestro amigo Paolo no se queje por la cebolla. Y ya está, emplatamos los jamoncitos y lo servimos con mucha salsa. Igualmente sobrará un poco, preparad pan. Lo podéis acompañar de unos spaghetti, una tortilla francesa o un puré de patatas, y tenemos la comida perfecta.
Buen provecho.
Resultado
Tiempo: 55 minutos (25 minutos con olla exprés)
Dificultad: 2/5
Digestión: 3/5
Precio: 6€
Dificultad: 2/5
Digestión: 3/5
Precio: 6€
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